El INICIO
En principio pienso que debo dar explicaciones de por qué hago las cosas, pero esta es una de esas que empiezas a hacer por que sí, por que puedes, tipo el meme-video de la viejita que dice “así soy” si no entendiste la referencia mírala.
Pienso que este va a ser un espacio para compartir experiencias y esas cosas que nadie ve de la empresa, aunque es más que seguro que va a terminar en algo muy diferente.
Hacia el 2016, cuando cursaba mi tercer semestre de Diseño Gráfico en el Instituto Tecnológico, me hicieron crear una marca para una empresa “ficticia”, normalmente haces la marca solo por tener nota, pero en mí caso nunca lo vi así, siempre quise tener una empresa. Haciendo retrospectiva ni siquiera sabía en qué me estaba metiendo, creo que fue mucho facebook, vi a empresarios jóvenes haciéndose ricos y uno “ahí humildemente”, por suerte la ilusión siempre ha sido más grande que la realidad. Poco a poco vas aterrizando pero para ir por partes, en este punto todos éramos empresarios en la clase, fue cuando puse el nombre de Solnus.
En realidad se resume en esto “solutio” + “somnus”, el primero significa: soluciones en griego (por alguna razón en ese período me obsesioné con el tema griego) y el segundo representa el dios de los sueños (porque para mí, mi empresa era un sueño ), que unidos dan el nombre de solnus = “solucionadores de sueños”.
El Instituto Tecnológico Superior Sudamericano
Biblioteca UTPL
Como estudiaba ingeniería en sistemas a la par en la UTPL, hice lo obvio, reuní amigos de sistemas para fin de ciclo y les dije pongámonos una empresa, éramos varios (5), para resumir ahora somos 2. Pero todo bien con el resto, ahora nos apoyan full en todo lo que necesitamos, ellos trabajan en grandes empresas. Ahí pasábamos metidos en la biblioteca de la técnica, jugando a ser duros programando, en ese entonces según nosotros haciendo nuestro primer programa de facturación en java y tratando de montar nuestra primera web en php. En todo valíamos maceta, porque así se empieza, lo bueno de empezar como estudiante es el hecho de que no importa mucho si fracasas vuelves a intentar sin la presión social que te impone la sociedad cuando ya tienes un título profesional.
Hasta este punto aún faltaba la parte más difícil en ese entonces, subir nuestra página web en la nube, en un servidor de verdad, viendo videos en youtube y demás de amanecidas, logramos subirlos, luego ya nos reuníamos en mi casa cuando había que quedarse un viernes o sábado. Para que les voy a mentir no fue complicado, no salíamos mucho así que hasta de excusa servía. Éramos una banda de desadaptados.
BURLAS Y APOYO
Cuando lo conseguimos, recién venía lo bueno, hacer algo que funcione para venderlo. Para cuando subimos la web ya éramos 4. De aquí en adelante vinieron los primeros problemas de motivación. Nos hackeaban la página como chiste, nuestros propios compañeros, en ese tiempo la frustración era grande, pero gracias a eso aprendimos a hacer páginas más seguras. ¿Por qué lo hacían?, no lo sé, pero ninguno tuvo la decencia de decir, mira ¿por qué no corriges aquí? , tienes un hueco de seguridad, jaja cosas que pasan. Bueno, ya habían pasado algunos meses, cuando eres pequeño no sé si para el resto, pero te pegan full los comentarios de la gente. Luego ya ni bola paras, hasta te ríes, creo que son etapas para endurarse. Por poner un ejemplo, llegas a la U, comentarios be like, siempre hay alguien random que dice (Te pegan una palmada en la espalda, viniendo desde atrás, riéndose fuerte para que los escuchen) :
– “El empresario” (la gente responde)
– Si podrás pues programar
– Que va a ser eso una empresa
– Hablas huevadas oe
– Los platudos, que inviten las papas , “como ya tienen empresa”
Se te gozan, porque solo tú sabes que es una empresa, el resto te ve como de arriba hacia abajo, podría decir que un 80 – 20, es decir, 80% se te gozan y un 20% te apoyan hasta por pena y seamos sinceros, porque en sus casas les enseñaron a no burlarse del resto jajaja. Bueno ahora que lo pienso mis proyectos daban risa y me rechazaron algunas veces, en ese tiempo soñaba con conectar los servicios médicos públicos y privados; en el mundo real necesitas más que tecnología, buenas intenciones y un buen cerebro para hacer que las cosas pasen, ya se los explicaré en un futuro blog, con esas cosas que no quieres aceptar, pero suceden a favor o en contra de tu voluntad
Estudiar, trabajar y aprender nuevas cosas del trabajo toma mucho tiempo, por ello no era de los mejores alumnos, se puede decir que era medio-bajo, excepto en las materias de programación ahí siempre sacaba casi lo máximo, la gente que es excelente en todo se los felicita, pero no era mi caso. Eso hace que mucha gente incluso los profesores duden de tu capacidad para tener una empresa, más aún cuando ya empiezas a tener gastos y créanme la preocupación por plata es mucho más grande que tener 20 (la nota máxima) en la calificación, más aún cuando contratas gente y sabes que tienes que pagar.
Para cuando ya vendí mis primeros sistemas, en serio, (6 semestre) la ecuación 80-20 se iba revirtiendo, ya me apoyaba un 30% ya era 70-30, parece poco pero te das cuenta que por lo menos una persona se deja de reír.
En ese entonces, trabajaba, estudiaba 2 carreras y a las 6 am iba al Deos (el gimnasio). Ahora que me pongo a pensar es muy difícil hacerlo, pero casualmente cuando inicias un negocio tienes demasiadas energías, aproveché al máximo eso, también pude ser presidente de la Juventud Idente en la U para ayudar a la gente, esto siempre me ha motivado desde niño. A cambio no salía mucho viernes o sábados (pocas veces); sin embargo, conocía muchas personas que fueron importantes y lo siguen siendo, inconscientemente proyecté una imagen seria para toda esa gente que me veía hacer las cosas y me recomendaban con nuevos clientes. Todo suma cuando haces cosas buenas, creas una red de buenas personas.
Cuando abrimos la ofi, no nos fijamos que no teníamos puerta y teníamos que cerrar para que no se nos mojen las computadoras cuando llovía jajaja y pusimos unas sillas de plástico ahí buenazas.
DECISIÓN DE EMPLEABILIDAD
Para cuando me gradué de la U ya habíamos construido lo más parecido a una empresa ya era un 60 -40, 60% de la gente se seguía riendo y un 40 ya me apoyaba y me veía como proyección a futuro. Ya solo quedamos 2.
Apenas me gradué, nuevamente de manera inconsciente tenía la experiencia de alguien mayor. Por lo que recibí 2 ofertas de trabajo al siguiente día de graduarme, casualmente en ambas me pagaban 1200 y 1300 respectivamente, mis ojos se hicieron dólares; sin embargo, no me veía trabajando para alguien más y no las acepté. Una voz dentro decía: <<qué bruto, acá no ganas nada>>, pero ya saben, la fe del emprendedor te hace creer que a futuro vas a crecer. Pasaron 6 meses y empezamos a crecer muy lento pero logramos revertir y ya éramos 80-20, casi nadie se reía, pero siempre había uno. Ya como profesional en este país, se te abren muchas puertas, debido mucho a la idiosincrasia retrógrada que tenemos, esto debería pasar antes. Hasta aquí la primera parte, creo que la siguiente puede ser acerca de las quiebras.
Como spoiler creo que ya se acabaron las brechas, ahora creo que estamos en un 95-5, ya nadie nos toma en burla, todos nos toman en serio, me arriesgo a decir que existe un 5, que siempre son personas que van a existir hablando a tus espaldas, especulo, ya ni paro bola, hago este párrafo porque muchas personas siempre coinciden en preguntarme algo que tenga que ver con “lo que la gente dice y piensa”, yo no paro bola.
No sé si les pasa a otros emprendedores, pero cuando empiezas a dar trabajo se siente buenazo, empiezas a crecer, no solamente en número, si no como persona, como una verdadera empresa. Ese punto considero yo como la brecha y el punto que marca la diferencia y ya nadie se ríe, todos creen en ti.
Agradecería mucho los comentarios, para tener feedback, consejos de mejora y de pronto si alguien se sintió identificado, comenten sus experiencias.